Ayer cuando terminé de hacer algunas cosas, decidí ir a preguntar unos cursos que tenía pensado llevar y bueno, solo eche a andar...
Mientras caminaba, veía una y otra vez rostros, algunos adustos, preocupados, cabizbajos, meditabundos, alegres... grises, pero siempre reflejaban algo... una cierta soledad!
Entonces me puse a re - mirar esas caras, pero sobre todo esas miradas, tan inciertas y me sumí en un vacío, pero no un vacío de temor, ni depresión, sino de no encontrar nada, si! Nada, una nada que no te inquieta, que no te atemoriza... pero que si te suspende, como un halo de luz o una pluma en el viento.
Caminé y caminé, yendo a preguntar lo que tenía que hacer y nuevamente me vi, en la calle, entre toda ese gentío... que me aturdía de tantas miradas que iban y venían, sólo quise caminar y así lo hice, no se cuanto mas caminé, hasta que me senté en una banca solitaria en un pasaje muy cerca ala Plaza Mayor o de Armas, no se!
Me sentía cansado de tanto mirar, cerré los ojos e intenté ubicar mi mirada, si! mi propia mirada, no pude encontrar más que vacío y eso que no pensé encontrar de nuevo allí... si! Esa Soledad, nuevamente!!
Cerrando los ojos, intenté desconectarme de todo, me sentí por momentos preocupado porque no sentía nada sólo me comencé a sentir cansado y sobre todo... Solo!. Empecé a llamar a amigos, familiares, a todos... para no sentirme así!
Sin embargo, me sentí mal.... me sentí solo!, sin nadie a lado, con nadie con quien bromear o al menos renegar, sin quien sonreír... Mirando a todos lados, pensé motivaciones o algo que intente decirme que aun puedo seguir caminando, me paré y seguí caminando un trecho más, hasta ubicarme cerca al Puente Santa Rosa, mirando el río veía una agua corriendo al anochecer, reflejando solo más noche, oscureciendo más esa noche que me insistía en esa soledad... Y sin querer entendí que puede llegar a sentir una persona que quiere acabar con esa soledad, alguien que cansado de llevar en hombros, decide tomar el camino angosto y sinuoso... Pero, llegó esa llamada que necesitaba... Una voz amable, conocida, tan mía, que me decía que estaba esperando por mí... mi madre!!!
Dí un suspiro tan largo como aquella caminata, decidí regresar a casa... ya hacía más frío y el cansancio llegaba más fuerte, cerré la casaca y caminé al encuentro del bus, ya era tarde...
GABO --- 16.May.2011
1 comentario:
Really good post!
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